miércoles, 24 de noviembre de 2010

EL ARREBATO

Hoy tuve un descubrimiento que me estremeció hasta los huesos y siento un deseo de expresarlo pues hace poco que hablaba del tema en Samurai VS Maquiavelo.

Hace aproximadamente un año, tuve una experiencia que consideré enriquecedora pero no supe hasta que punto hasta ahora.

Me encontraba en una especie de seminario, algunos lo recordarán aunque poco hablé de él. El seminario era algo así como "motivacional", aunque en realidad lo que pretende es lograr explorar nuestra psique y lograr cambios en nuestra manera de responder al mundo. Bueno, estoy divagando.

En éste seminario, una de las actividades grupales consistía en agruparnos en pequeños núcleos de N número de personas, 3, 5, 2, etc. Cada vez que dicen un nuevo número tienes que agruparte con quienes no te has agrupado ya, a fin de hacer todo dinámico. Siempre corres el riesgo de quedarte sin grupo, así que el arrebato con la que buscas agruparte de quien sea es bastante alto (curiosa la forma en que el ser humano refleja su inherente necesidad de pertenencia, aún tratándose de un juego). A mitad del juego el coordinador gritó: DOS. Y un tímido chico de unos 16 años que había observado un par de veces antes se acercó dudoso a mi casi buscando mi aprobación para agruparse conmigo, ya estábamos tomados de los brazos cuando una allegada mía (con quien había compartido gran parte del seminario) se colocó entre los dos y sin miramientos desplazó al pobre chico.

Mis sentimientos saltaron confundidos, me sentí mal por el muchacho, pero también sorprendido y admirado por la determinación de ella. Un par de días después le dije que me había enseñado una gran lección.

"Toma de la vida lo que quieras, habrá personas que no tengan la fuerza y determinación suficiente para tomarlo, o han llegado a obtenerlo con facilidad de acuerdo a sus circunstancias. Toma lo que te desees, si otros lo tienen y no tienen la fuerza o voluntad para luchar por él, se trata de selección natural"

Un poco lejos de mi naturaleza, quizá, pero bastante ilustrador.

Durante éste año, he tenido la oportunidad de observar a ésta mujer de cerca, su dinámica laboral y social. Es una abusona (y me siento mal por hablar así de alguien públicamente pero así es) Paga mal a sus empleados, hace tranzas fiscales para evadir impuestos, incluso es capaz de adelantarse en la lista del karaoke en una reunión con sus amigos con tal de pasar antes.

Hoy, vi actuar a su hija. Alguien mencionó el nombre de una película infantil mientras sostenía un pequeño papel en la mano. La niña (de apenas 5 años) preguntó quién había dicho aquello y sin mayor miramiento le arrebató el papel de las manos y luego le reclamó porque el papel no tenía nada referente a la dichosa película.

Me horroricé del comportamiento de la niña, pero tampoco vi mucha diferencia con respecto a lo que su madre había hecho hacía un año antes, y que seguía haciendo aún ahora.

El arrebato.

Cierto es que la selección natural favorece al más fuerte, al más agresivo, al más ágil, al más hermoso; sin embargo nuestra condición humana, supuestamente más conciente y superior al de un animal nos dota presumiblemente del entendimiento de la justicia, la lealtad, la verdad, el honor y la benevolencia, por mencionar algo. ¿Qué sería de nosotros y nuestro entendimiento del mundo si a alguien se le hubiera ocurrido "desechar" al pobre parapléjico de nombre Stephen Hawking, uno de los físicos más importantes de la historia de la humanidad?

El arrebato ciertamente podría proporcionarnos ventajas ante los poco hábiles, poco audaces, antes los minimizados o devaluados. Aún así, no logro encontrar en mi corazón la satisfacción del triunfo al plantearme en la posición. No concibo cómo podría vivir tranquilamente sabiendo que despojé de alguien que por derecho o circunstancia poseía algo, al menos no sin una confronta justa.

Es como ir por la calle asaltando niños.

ME REHUSO A HACERLO. Y no sé si tal aseveración me lleve al éxito o a la ruina, pero sé que traerá calma a mi conciencia.

8 comentarios:

  1. Una cosa es tener seguridad, determinación, decisión, fuerza, voluntad y valentía para ir por lo que quieres a pesar de los obstáculos y otra es hacerlo pisoteando quienes se te pongan enfrente...

    Bien ratita!!

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  2. Creo que la "selección natural" prefiere la inteligencia a la fuerza (bruta, económica, política, etc.). Además, es sencillo arrebatar del débil, pero hay valores e ideales (como la equidad o la jusiticia) que nos hacen elegir no arrebatar.

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  3. Bill Gates, Steve Jobs, Stephen Hawkin y Karl Sagan quizá te darían la razón. Aún así, ¿sostienen ellos tanto poder como quizá lo hicieron alguna vez Hitler, El César o Alejandro?

    Sé que dirás que ellos no eran estúpidos, pero ¿podrían haber alcanzado sus objetivos sin la fuerza?

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  4. coincido con luna no es correcto almenos para las personas que se respetan y tienen amor propio no es correcto obtener lo que queramos a cambio de pisotear y humillar a los demás. todo lo que hagas se te regresa multiplicado

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  5. Anónimo, lo sorprendente es que para muchos es una cuestión de amor propio tomar "lo que les corresponde"

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  6. si se tiene que arrebatar algo a otra persona entonces nunca les correspondió

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  7. Que bonita forma de resumirlo anónimo.

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